LONDRES (EFE Dow Jones)--Los precios de consumo de la eurozona aumentaron apenas levemente en agosto respecto a hace un año, lo que podría servir de acicate a las especulaciones de que el Banco Central Europeo tendrá que ampliar su programa de compra de bonos.
Después de una larga y continua caída de la tasa de inflación, los precios de consumo descendieron por primera vez en la evolución interanual en diciembre. Al mes siguiente, el BCE anunció un programa de expansión cuantitativa por el que se comprometió a comprar más de 1 billón de euros en bonos, la mayoría públicos. El plan se lanzó en marzo con el objetivo de acercar la tasa de inflación al objetivo de un nivel justo por debajo del 2%.
Los precios de consumo de la eurozona repuntaron por primera vez en seis meses en mayo, una victoria menor para el BCE en su campaña por evitar la deflación.
Sin embargo, la tasa de inflación anual volvió a caer en junio a un nivel ligeramente por encima de cero y se ha mantenido ahí desde entonces. Eso avivará las especulaciones de que el BCE podría tener que aumentar su programa de compra de bonos más allá de septiembre de 2016.
Aunque es improbable que el consejo de gobierno del BCE decida adoptar nuevas medidas en la reunión de política monetaria del jueves, los analistas esperan que el presidente del banco, Mario Draghi, haga hincapié en su compromiso de cumplir el objetivo de inflación y de ajustar la política hacia tal fin.
Fuente: The Wall Street Journal
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